¿Todo el mundo quiere hablar?

Pues no, Paco Ignacio Taibo II, yo no. Yo fui exclusivamente a escuchar.

Como lo dijo Jesusa, el movimiento cultural se convirtió en la espina dorsal de la Resistencia Civil Pacífica. Durante 43 días, a lo largo de 12 kilómetros siempre hubo alguna manifestación cultural que surgió del pueblo y era dirigida para el pueblo (algo tan distinto a lo que vimos en el sexenio que está por terminar, donde la cultura le valió al presidente). Por eso fui a la "Gran asamblea de trabajadores de la cultura con rumbo a la Convención Nacional Democrática". Y sí fue grande. Calculo que en un momento hubo aprox. 200 ó 250 personas. Me parecía importantísimo escuchar lo que tenían que decir, cuáles eran las propuestas y hacia dónde pensaban caminar.

Pero todo empezó mal. Uno no puede pasar más de 30 minutos tratando de establecer "la orden del día". OK, estoy de acuerdo que las cosas tienen que hacerse bien, pero querer hacerlo como si estuviéramos en la ONU... bueno. Hubo muchas intervenciones, todas valiosas, todas propuestas, casi todas fuera de contexto. Estábamos ahí para decidir cosas, porque se necesita decidir qué hacer YA. Y sin embargo, muchos se enfrascaron en discusiones que son cardinales, pero que en ese momento preciso, sólo entorpecían el desarrollo.

Finalmente la decisión más importante que teníamos que votar: ¿Tenemos que proponer la creación de un sexto punto a los cinco que ya se platearon como programa que aborde a la cultura, o incluir el aspecto cultural en uno o en todos los puntos? Para ese momento (ya más de las 2 de la tarde) ya no estaban ni la mitad de los que hubo en un principio. La gente de la mesa (que tampoco estaban todos) propuso que hiciéramos esa votación el jueves, porque era algo que definiría al movimiento. A mí me parecía casi obvio, una decisión así no puede ser tomada a la ligera, pero no, al grito de "ya votamos" tuvieron que decidir algo que lógicamente no representaría a la comunidad cultural, porque los que estábamos ahí estábamos lejos de ser "la mayoría". Así que me fui, en un acto de protesta silenciosa.

Así que uso este foro para expresar mi opinión. A pesar de que es cierto que la "cultura" (en el sentido marxista, que no es precisamente el que funciona en México, aunque a la gente le guste pensarlo así) abarca todos los ámbitos, considero que la inclusión de un sexto punto sería un avance impresionante. Ningún gobierno le ha puesto la atención a la cultura (qué mejor manera de demostrarlo que con una secretaria totalmente insensible al pensamiento progresista, que al final es el motor de la cultura), y que se incluya un sexto punto en la agenda de "lo importante", "lo que hay que hacerse" da un giro de 360 grados a la visión de nación que tenemos. Además, a partir del sexto punto, la creación de una política cultural de Estado (inexistente ahora) sería el primer paso obvio, cosa que no necesariamente sucedería si se agrega la visión cultural al punto del patrimonio cultural.

Pero bueno, ahora vienen muchas cosas (más allá de la CND, que hay que ver como un PROCESO, no sólo como un día histórico en el calendario mexicano). Jesusa habló de la publicación de los textos que han surgido del movimiento, que son productos de la cultura popular y el folclore. También hay que pensar qué le conviene más al país, al movimiento, a la realidad nacional... y ver a la CND como la posibilidad de trabajar en la construcción de un frente progresista verdadero, y no uno endeble y fracturado como el que existe ahora. Y creo que las posibilidades para eso son mucho mucho más grandes si AMLO no es el presidente electo (por más que me duela aceptarlo).

Creo que una de las grandes preguntas desde este lado de la trinchera, y que necesita ser reflexionada profundísimamente ahora que tenemos este espacio privilegiado es: ¿Qué se entiende por "cultura" desde la izquierda? Cuando resolvamos eso, el camino será mucho menos sinuoso.